En este tiempo de Cuaresma, Stella Maris comparte la siguiente oración:
Vacío mi mochila de mis comodidades y lujos, para llenarla de lo necesario para esta travesía: esfuerzo, lucha, supervivencia, superación, confianza y esperanza. Con este equipaje, Señor, voy a un encuentro personal contigo. Ayúdame a agudizar mis sentidos, a vencer las tentaciones y a interiorizar en el corazón la fe. Dios mío, anhelo escuchar nítidamente en este desierto, tu Voz a través del silencio y la soledad.
Tengo un desierto que cruzar, Padre. Dame la sabiduría de cruzarlo sin perder el sentido de la verdad y sabiendo aceptar que el desierto de la prueba es necesario para fortalecer tus propósitos en mí y templarme en mi camino de peregrinación. Capacítame, Señor, en el desierto, desde mi fragilidad, para aceptar la obra que Dios tiene pensada para mí. Me adentro, Señor, en el desierto para que moldees todas las áreas de mi vida que deben ser transformadas.
Sé que tienes mucho trabajo conmigo por delante pero en este tiempo cuaresmal te pido, Señor, que no deje de buscarte, de alimentarme con tu Palabra, de ser fiel a la obra que iniciaste conmigo en el momento de mi gestación y, fundamentalmente, de servirte como Tú quieres ser servido. Concédeme, Señor, que al final de esta travesía espiritual pueda vivir en el oasis de la conversión, Amén.Marcela Vera
EPJ
¿Cómo vas al encuentro del Señor?
