En cada instante y cualquier situación en que te encuentres, en el fervor o en la aridez, en la fidelidad o en la deslealtad, ámame… como eres. Quiero el amor de tu pobre corazón; si esperas ser perfecto, no me amarás nunca. ¿Acaso no podría hacer de cada granito de arena un ángel radiante de pureza, de nobleza y de amor? ¿acaso no soy yo el Omnipotente? Y si me gustara… read more