En un primer momento el silencio es pura privación, carencia, hueco molesto, arrancarse de actividades y personas que llenaban. El silencio se percibe como inútil, aburrido, pérdida de tiempo. Lleno del eco confuso de las cosas dejadas atrás, es exigencia de compañía, de actividades. Si se sobrepasa este momento, el silencio se hace palabra. Los fantasmas escondidos empiezan a salir a la luz y a gritar sus exigencias. Antes trabajaban desde… read more