Nos dice el profeta Isaías:
¿No lo sabes acaso? ¿Nunca lo has escuchado? El Señor es un Dios eterno, Él crea los confines de la tierra; no se fatiga ni se agota, su inteligencia es inescrutable. Él fortalece al que está fatigado y acrecienta la fuerza del que no tiene vigor. Los jóvenes se fatigan y se agotan, los muchachos tropiezan y caen, pero los que esperan en el Señor renuevan sus fuerzas, despliegan alas como las águilas; corren y no se agotan, avanzan y no se fatigan. (Isaías 40, 28-31)
Hay días en que nos sentimos solos, desanimados, con ganas de dejar todo y rendirnos simplemente. Pensamos que nadie está ahí para apoyarnos, y finalmente todo provoca que dejemos de lado aspectos importantes de nuestras vidas, como a nuestras familias, amigos, estudios, trabajo, salud y nuestra espiritualidad. Con la lectura del profeta Isaías, Dios nos recuerda que no estamos solos. Él nos acompaña, nos alienta y nos fortalece, pues por más duro que sea el camino, Él nunca nos abandona y nos guía a ser las mejores versiones de nosotros mismos.Casa Juvenil Don Bosco
La Cisterna
A pesar de que Dios esté siempre presente, hay ocasiones en que no se tiene la
mejor relación con Él, por ello te invitamos a preguntarte: ¿cuán dispuesto estoy de
entregarle mi corazón, mente y pensamientos a Dios? ¿Confío en Él?