Por estos días, la Cruz de Jesús nos une a las personas crucificadas en todo el mundo por diferentes razones: económicas, materiales, étnicas, sexuales, religiosas… y de forma inaudita, en este tiempo, nos une a los afectados por la pandemia del Coronavirus. Este material se ofrece para vivir el camino de la cruz, desde la casa, pero en comunión con la Familia Salesiana.