En Jesús compite su denuncia del pecado con una inagotable misericordia para con el pecador. Jesús escandaliza perdonando el pecado de la adúltera, conversando con la samaritana, sanando y perdonando a tullidos y posesos, haciendo caso omiso de las impurezas legales, sentándose a la mesa de los pecadores. Jesús define al Padre y a sí mismo por su corazón abierto al perdón en la parábola del hijo pródigo, en el ciclo del… read more