Hoy celebramos el nacimiento de Don Bosco… es un nacimiento que hace florecer otros tantos nacimientos por su fecundidad pastoral.
Ya en los primeros escritos de Don Bosco sobre la fundación de la Sociedad Salesiana hace referencia a un grupo de colaboradores que se ayudaban con un mismo espíritu aunque no tenían vida común.
Los primeros colaboradores le aseguraban en el oratorio las lecciones vespertinas, y el catecismo. También le colaboraban mujeres que aportaban su contribución, basta pensar en el número de mamás que le ayudaron con los niños del Oratorio y del internado. Se trata de una sociedad interesante integrada por laicos y eclesiásticos; adultos y jóvenes; hombres y mujeres.
La verdad es que hoy es difícil saber qué grado de dependencia tuvieron estos eclesiásticos con Don Bosco, ni tampoco cuánto fue el tiempo que dedicaban a la obra del oratorio; lo que sí es importante de destacar es el hecho que Don Bosco se percata y hace experiencia de la validez de un trabajo en colaboración.
¿Qué pides hoy al Señor, por medio de Don Bosco? ¿de qué le das gracias?