Defender la alegría como una trinchera
Defenderla del caos y de las pesadillas
de la ajada miseria y de los miserables
de las ausencias breves y las definitivasdefender la alegría como un atributo
defenderla del pasmo y de las anestesias
de los pocos neutrales y los muchos neutrones
de los graves diagnósticos y de las escopetasdefender la alegría como un estandarte
defenderla del rayo y la melancolía
de los males endémicos y de los académicos
del rufián caballero y del oportunistadefender la alegría como una certidumbre
defenderla a pesar de los dioses y de la muerte
de los parcos suicidas y de los homicidas
y del dolor de estar absurdamente alegres
defender la alegría como algo inevitable
defenderla del mar y las lágrimas tibias
de las buenas costumbres y de los apellidos
del azar y también…también de la alegría.Mario Benedetti
¿Qué te dice el Señor en este día que concluye?