+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Juan
Jesús resolvió partir hacia Galilea. Encontró a Felipe y le dijo: “Sígueme”. Felipe era de Betsaida, la ciudad de Andrés y de Pedro.
Felipe encontró a Natanael y le dijo: “Hemos hallado a Aquél de quien se habla en la Ley de Moisés y en los Profetas. Es Jesús de Nazaret, el hijo de José”.
Natanael le preguntó: “¿Acaso puede salir algo bueno de Nazaret?”
“Ven y verás”, le dijo Felipe.
Al ver llegar a Natanael, Jesús dijo: “Éste es un verdadero israelita, un hombre sin doblez”.
“¿De dónde me conoces?”, le preguntó Natanael.
Jesús le respondió: “Yo te vi antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera”.
Natanael le respondió: “Maestro, Tú eres el Hijo de Dios, Tú eres el Rey de Israel”.
Jesús continuó: “Porque te dije: ‘Te vi debajo de la higuera’, crees. Verás cosas más grandes todavía”.
Y agregó: “Les aseguro que verán el cielo abierto, y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre”.
Palabra del Señor.
Reflexión
Terminamos de leer hoy el capítulo uno del Evangelio según San Juan. El texto nos presenta la vocación de los siguientes dos discípulos: Felipe y Natanael. La vocación de Felipe es narrada aquí por la importancia que tiene este apóstol en este evangelio (Jn 1,43; 6,5; 12,21-22; 14,8-10), pero de forma breve, ya que sirve de transición para presentar a Natanael, discípulo que no pertenece a los Doce, pero que desde la antigüedad (quizá erróneamente) ha sido identificado con Bartolomé. Felipe, había encontrado a Jesús y, no pudiendo callar tan inmensa alegría se lo comunica a Natanael, el cual, que procedía de Caná de Galilea, mira en menos la aldea vecina de Nazareth, de donde procede Jesús, y cuestiona que Jesús sea el Mesías prometido; pero Felipe, usando las palabras de Jesús le dice: “Ven y verás”. Cuando Jesús lo ve lo alaba por ser un verdadero israelita sin doblez, haciendo referencia a Jacob (el patriarca llamado después Israel) que significa “el que engaña”. Natanael, cuyo nombre significa “don de Dios”, es ejemplar, dice el Maestro, porque sabe que estudia las Escrituras, como un rabino, en la calma y bajo la sombra de la higuera. Por eso Natanael, habiendo estudiado las Santas Escrituras reconoce en Jesús al Hijo de Dios y Rey de Israel. El Señor promete grandes cosas que se refieren al ministerio que ya está pronto a iniciar y termina con una frase que recuerda la escalera de Jacob y al Hijo del Hombre que viene en las nubes del cielo como dice el profeta Daniel; la escala de Jacob (Gn 28,12) une el cielo y la tierra indicando que Jesús es el camino que lleva al Padre (Jn 14,6) y es la puerta del Cielo o del Reino de Dios (Jn 10, 7.9).
¿Cómo puedo ser apóstol(a) del Señor? ¿Leo y estudio las Escrituras como Natanael? ¿Soy como Jacob o como Natanael?