Comenzar el año es como mirar hacia el horizonte y preguntarnos qué hay más
allá, qué situaciones nuevas me sorprenderán, con qué personas me voy a
encontrar, qué emociones viviré, qué desafíos tendré que afrontar.
Se nos abre un mundo de preguntas motivadas por la incertidumbre, por lo
desconocido, por lo aún no experimentado. Esto es algo normal porque no
podemos controlar TODO, lo que nos permite desafiarnos, y que teniendo una
actitud positiva nos ayuda a motivarnos para vivir este nuevo año escolar como
una gran aventura, en donde mi meta no sea quedarme en la frustración, el enojo,
la tristeza, sino desarrollar nuevas formas de enfrentar los retos, las dificultades, elvmantener y fomentar nuevas amistades y por sobre todo a descubrir a ese Dios
que me invita a reconocerlo más allá de lo evidente.Edith Henríquez Velásquez
Colegio Salesianos de Valparaíso
Y tú, ¿quieres ser parte de esta nueva aventura?