Juan Bosco nace el 16 de agosto de 1815 en I Becchi, Turín, Italia. Sus padres eran Margarita y Francisco, sus hermanos Antonio y José. Su papá murió cuando tenía dos años. Su infancia campesina estuvo acompañada de orfandad y pobreza. Su mamá Margarita, maestra y educadora le dejó una gran herencia, la riqueza de la fe, en un Dios que no abandona y a quien se debe servir y amar como también una gran devoción a la Virgen. Descubre desde niño el llamado de un Dios paternal, que lo sostiene y acompaña en lo cotidiano. Margarita le enseñó a rezar y lo preparó para los sacramentos, lo acompañó en su primera confesión, también en su primera comunión, que es para él un momento de crecimiento en obediencia y fidelidad. Con la ayuda de su madre y de personas muy determinadas, desde niño siente el llamado al sacerdocio y logra hacer realidad su deseo con gran esfuerzo, estudiando y trabajando. Así se hizo inteligente, libre y capaz de hacer todo por amor a los demás.
Claudia Martí
Salesianos Concepción
¿Tienes presente que tú puedes ser la presentación de Dios en tus hijos o
seres queridos, como lo fue Mamá Margarita para Don Bosco?