+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo
Después de la partida de los magos, el Ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: «Levántate, toma al niño y a su madre, huye a Egipto y permanece allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo.»
José se levantó, tomó de noche al niño y a su madre, y se fue a Egipto.
Allí permaneció hasta la muerte de Herodes, para que se cumpliera lo que el Señor había anunciado por medio del Profeta: Desde Egipto llamé a mi hijo.
Cuando murió Herodes, el Ángel del Señor se apareció en sueños a José, que estaba en Egipto, y le dijo: «Levántate, toma al niño y a su madre, y regresa a la tierra de Israel, porque han muerto los que atentaban contra la vida del niño.»
José se levantó, tomó al niño y a su madre, y entró en la tierra de Israel. Pero al saber que Arquelao reinaba en Judea, en lugar de su padre Herodes, tuvo miedo de ir allí y, advertido en sueños, se retiró a la región de Galilea, donde se estableció en una ciudad llamada Nazaret. Así se cumplió lo que había sido anunciado por los profetas:
«Será llamado Nazareno».
Palabra del Señor.
Reflexión
Llegamos hoy al sexto día de la Octava de Navidad y en esta ocasión nos corresponde celebrar la Fiesta de la Sagrada Familia de Jesús, María y José. El Leccionario Ferial presenta para esta fiesta un texto tomado de San Mateo correspondiente a la huida a Egipto y posterior regreso a Palestina por parte de la Sagrada Familia. Esta situación nos recuerda la marcha del pueblo de Israel a Egipto y su posterior éxodo desde el país de los faraones. Como una forma de explicar por qué a Jesús le llaman “nazareno” y no “belemita” por haber nacido en Belén, San Mateo describe el regreso e instalación de la Familia en Nazaret a partir de los cuatro años de Jesús, por lo tanto, para el común de la gente era como si Jesús siempre hubiera vivido en Nazaret. Cabe destacar que se han propuesto varios orígenes de la palabra Nazaret que Mateo relaciona con Jesús el Mesías; en efecto Nazaret puede derivar de las siguientes palabras hebreas: “néser” que significa vástago o retoño, “nazir” que significa consagrado o “nasar” que significa vigilar o florecer. Sabemos que los habitantes de Nazaret eran fieles devotos judíos y probablemente descendientes no sólo de la tribu de Judá sino también de la familia del Rey David; así entonces los nazarenos podrían ser los que “vigilan” esperando al Mesías y el “Nazareno” podría ser el “consagrado” o el “retoño” del tronco de Jesé (el padre de David). Lo que sí es seguro es que en Nazaret es donde Jesús vive y crece bajo la atenta mirada de sus santos padres María y José, con su valiosa enseñanza Jesús crece humanamente, conoce a Dios, la Escritura y las Tradiciones de su Pueblo y madura, poco a poco, el proyecto salvífico que un día llevará a cabo.
¿Dónde y de quién aprendí a amar a Dios y al prójimo? ¿Soy agradecido (a) con mis padres y entregado (a) por mis hijos? ¿En qué se parece mi familia a la Sagrada Familia?