La nueva ley del amor exige mucho más. No se trata ya del cumplimiento vacío y frío de las normas. Ahora, está en juego tu propia vida, tus sentimientos, tus emociones, tu razonamiento, tu corazón. Si ayer ya se nos anunciaba que tratemos a los demás como queremos ser tratados nosotros, hoy se nos invita a la paz. el amor a Dios está íntimamente vinculado al amor al prójimo. ¿cómo se, cuanto amo a Dios? ¡Fíjate en cuanto amas a tu hermano/a! Toma conciencia de cómo estás amando. ¿te dejas amar? ¿Amas?
*Oración.
Jesús, Tú que nos conoces a fondo,
que sabes lo que es cada uno,
con sus deseos y debilidades:
DANOS TU PERDÓN
DANOS TU ABRAZO DE AMIGO.
al que no es buen amigo de los demás,
al que abusa demasiado de los otros.
Al que no se interesa por los demás, ten piedad Señor,
DANOS TU PERDÓN
DANOS TU ABRAZO DE AMIGO.
Jesús, aún no te conocemos hoy,
no nos sabemos apenas nada
del evangelio.
Queremos ser tus amigos
¡y nos preocupamos tan poco de Ti!
DANOS TU PERDÓN
DANOS TU ABRAZO DE AMIGO
Jesús perdona porque nuestras manos
sólo las usamos para nuestro provecho,
porque nuestros ojos sólo ven lo que nos interesa,
porque nuestro corazón
sólo nos ama a nosotros,
porque nuestra alegría
no sabemos compartirla con los demás.
JESÚS, DANOS TU PERDÓN
DANOS TU ABRAZO DE AMIGO.
¿Qué te dice el Señor esta noche?