Vuestra soy, para Vos nací
¿Qué mandáis hacer de mí?
Soberana Majestad,
eterna sabiduría,
Bondad buena al alma mía;
Dios, Alteza, un Ser, Bondad:
la gran vileza mirad,
que hoy os canta amor así:
¿Qué mandáis hacer de mí?
Vuestra soy, pues me criasteis;
Vuestra, pues me redimisteis;
Vuestra, pues que me sufristeis;
Vuestra, pues que me llamasteis;
Vuestra, pues que me esperasteis;
Vuestra, pues no me perdí;
¿Qué mandáis hacer de mí?
Veis aquí mi corazón,
yo le pongo en vuestra palma:
mi cuerpo, mi vida y alma,
mis entrañas y afición.
Dulce esposo y Redención,
pues por vuestra me ofrecí
¿Qué mandáis hacer de mí?
¿Qué nos dice el Señor?