Lc 6, 12:
“Por aquellos días fue Jesús a la montaña a orar, y pasó la noche orando a Dios. Su fama se extendió mucho, y mucha gente acudía para oírlo y para que les curase las enfermedades. Pero él se retiraba a los lugares solitarios para orar”.
Oración
Orar es conversar, entrar en sintonía con Dios. Es abrir el corazón y dejar que nuestros pensamientos y sentimientos más profundos se transparenten en el diálogo íntimo con el Padre. Día a día y verás cómo Dios responde, aunque a veces sientas que su respuesta no te complace, Él siempre tiene un plan perfecto para ti. Búscale en la angustia, pero también búscale para agradecer. Cuéntale a Dios de tus vivencias y pide de su Gracia para crecer.