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Mateo 6, 24-34: No se inquieten por el día de mañana

22 de Junio 2019     Freddy Araya    

29-05-2019

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+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo

Dijo Jesús a sus discípulos:
Nadie puede servir a dos señores, porque aborrecerá a uno y amará al otro, o bien, se interesará por el primero y menospreciará al segundo. No se puede servir a Dios y al Dinero.
Por eso les digo: No se inquieten por su vida, pensando qué van a comer o qué van a beber, ni por su cuerpo, pensando con qué se van a vestir. ¿No vale acaso más la vida que la comida y el cuerpo más que el vestido?
Miren los pájaros del cielo: ellos no siembran ni cosechan, ni acumulan en graneros y, sin embargo, el Padre que está en el cielo los alimenta. ¿No valen ustedes acaso más que ellos? ¿Quién de ustedes, por mucho que se inquiete, puede añadir un solo instante al tiempo de su vida?
¿Y por qué se inquietan por el vestido? Miren los lirios del campo, cómo van creciendo sin fatigarse ni tejer. Yo les aseguro que ni Salomón, en el esplendor de su gloria, se vistió como uno de ellos. Si Dios viste así la hierba de los campos, que hoy existe y mañana será echada al fuego, ¡cuánto más hará por ustedes, hombres de poca fe!
No se inquieten entonces, diciendo: “¿Qué comeremos, qué beberemos, o con qué nos vestiremos?” Son los paganos los que van detrás de estas cosas. El Padre que está en el cielo sabe bien que ustedes las necesitan.
Busquen primero el Reino de Dios y su justicia, y todo lo demás se les dará por añadidura. No se inquieten por el día de mañana; el mañana se inquietará por sí mismo. A cada día le basta su aflicción.
Palabra del Señor.

Reflexión

En el evangelio de hoy se habla claramente de vivir el “momento presente”: no darle vueltas al pasado, sino abandonarse en Dios y su misericordia. No atormentarse por el mañana, sino confiarlo a su providencia… Quien decide vivir el Reino y estar al servicio del Señor y de los hermanos, adoptará una vida austera y sencilla. Asimismo, vivirá en forma natural su confianza en la Providencia porque sabrá reconocer la diferencia entre aquello que es necesario para vivir y los bienes materiales innecesarios que ahogarán su vida. Jesús hoy nos pide que debemos tener una preocupación principal: buscar el reino de Dios. Es decir, buscar que Dios reine en nuestro corazón y en nuestra vida. Dejarle a él que dirija todas nuestras acciones. Sabemos que hay otros “reyes” que llaman a nuestra puerta para ocupar el primer puesto en nuestro corazón. Jesús menciona a uno de esos dioses: el dinero. Pero bien sabemos, y nos lo advierte Jesús, que “nadie puede estar al servicio de dos amos”.

A la luz del evangelio me pregunto ¿Qué espacio ocupa Dios en mi vida? ¿Confío plenamente en Él y su Providencia? ¿Reina Él en mi corazón, en mi vida?

Categories: Evangelio diario

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